17 jul 2012

Perpetuo estado de pecadora

Dejare lagrimas correr por las mejillas cuya integración es duda, desilusión y una intensa necesidad de que todo suceda de una vez y por todas, mas todo esto es causado por mi misma, al ceder al perpetuo silencio que va atado a la timidez puesto que nunca seré capaz de confesar estos pensamientos forjadores de esperanzas creados por la ilícita y desatada actitud de pecadora ¿Más cómo podría volver a mi antiguo estado de inocencia una vez manchada la limitada fantasía? Mas ahora podré dejar sin limites a mi imaginación a pesar que en su proceso las lagrimas siempre se vean implicadas.

No hay comentarios: