19 mar 2012

Desesperadas palabras de poeta

Las personas nos proporcionan felicidad pero no puede curar la insania, pueden lograr hacernos olvidar lo malo pero siquiera intentan entrar a nuestro mundo: nuestra mente, y fracasan.


Quieres que sean como esas pastillas que te recetan cuando estas deprimido pero cuando te das cuenta que la adicción puede destruir la felicidad que obtuviste durante ese tiempo y la cura no reside en el amor y la amistad a menos que seas fuerte de alma y solo pocas personas pueden resistir lo que en realidad conlleva la soledad.


Imagina el hecho de que no pudieras soportar tu propia mente ¿A quién o qué recurrir cuando el pensamiento constante te paraliza o te horroriza?


Cuando tengan esa respuesta hagánmela saber, yo dependo de ella y créanme tengo esos sentimientos como el amor y ese valor como la amistad pero aun así la soledad y el horror encuentran satisfactorio el hecho de gritar a mis oídos.


Y quizás necesito desesperadamente que me hagas ser capaz de escapar de este mundo y te conviertas en él o simplemente que me escuches y hagas algo mas que susurrar te amo, me estoy perdiendo y necesito apoyarme en la felicidad que me brinda tu mirada, la felicidad se vuelve muy rota cuando estoy sola y las lagrimas acuden cuando quiero levantarme

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